jueves, 9 de julio de 2009

UNO, SOBRE UNO MISMO

Alguna vez me referí a las entrevistas laborales y ahora pongo un ejemplo exacto. Una vez me vi forzada a escribir esto:

Uno de mis puntos fuertes es que siempre busco perfeccionarme. Esa insistencia en superarme profesionalmente es uno de los motivos que me lleva a postularme esta vez. Además, tengo iniciativa, profesionalidad, me gusta trabajar en equipo y me adapto a diferentes funciones.
Mi responsabilidad es defecto y virtud, porque muchas veces mi pasión por el trabajo que hago me vuelve obsesiva en el ámbito laboral. Ese es un punto a mejorar, porque algunas veces este escenario no me permite disfrutar en plenitud de lo que hago.

Y tuve que redactar mi autobiografía:

Nací en Monte Grande, Buenos Aires, el 2 de noviembre de 1982 y soy la primera hija del matrimonio de Eduardo Pujol y Marta Wechsung. Dos años después llegó Andrés, mi único hermano.
En 1989 con mi familia nos mudamos a Valle Hermoso, Córdoba, por iniciativa de mi padre, que quería que mi hermano y yo tuviéramos una infancia en contacto con la naturaleza. Cinco años después volvimos a Monte Grande, pero la experiencia en el campo fue muy valiosa.
En Valle Hermoso comencé un curso de dibujo (que abandoné después de dos años) e inicié mis estudios de folklore, que terminarían en el año 2000, cuando me recibí de Profesora de Danzas Nativas.
Durante la infancia y la adolescencia practiqué varios deportes: tenis, básquet, vóley y atletismo. Eso hizo en gran parte que me interesara en el Periodismo Deportivo.
Desde hace tres años me independicé y vivo sola en Capital Federal. Además de trabajar, dedico mi tiempo a ir al cine, a leer y a estudiar música: toco el saxo desde hace dos años.

Vergüenza ajena (o propia, en realidad).

15 comentarios:

Etienne dijo...

Las reseñas para los CV o postulaciones laborales son armas de doble filo.
Si ponés poco, corres el riesgo de no calificar.
Si ponés demasiado, sos mucho para ese puesto y te convierte en sospechosa.

Hay que ver lo que uno pone para que te tomen...

Beso!!

Joel Kotlar dijo...

Sí, hola, soy lector de este blog y quisiera saber cuánto me costaría un curso para aprender a bailar correctamente el pericón. Gracias.

Anónimo dijo...

¿Profesora de Danzas Nativas? Esa te la tenías guardada.

Princesa Turquesa dijo...

Maaal!, aunque ahora entiendo tu ductilidad para el candombe...:)

De Tal Palo dijo...

Gracias a Alá que ya se están dejando de usar esas porquerías en RRHH.
A tu carta le hubiese agregado que sos la mejor cocinera de guisos de los últimos tiempos, suma a lo loco (si, quedé obsesionada).

Anónimo dijo...

Siempre me pareciste una persona muy interesante; y ahora que leo esto sobre tu vida, lo confirmo con total convicción. Ojalá nos volvamos a cruzar.

Belén dijo...

un anonimo enamorado!

te dejo un juego que me dejaron en el blog:


La consigna es:

1) Agarrar el libro que tenés más cerca.

2) Abrirlo en la página 161.

3) Buscar la 5º frase (completa).

4) Citar la frase en tu blog.

5) Pasarlo a otros 5 blogs.

AYE dijo...

Los anónimos no tienen credibilidad, Belén. Son como un mito: supuestamente se trata de algo (alguien en este caso), pero no se sabe si son verdad o no.
Y los juegos de los blogs son como las cadenas de mails. Esta, debo reconocerlo, es un poco creativa.

Perdón! Besos!

Anónimo dijo...

Es cierto, el anonimato no genera credibilidad. Pero puede surgir a partir de distintas necesidades, como la falta de coraje (no en este caso) o algún deseo de expresar privadamente un sentimiento en un medio público, sin la posibilidad de expresarlo de otra forma. Cuando la oportunidad nos favorezca lo entenderás. Mientras tanto te digo: sos fascinante.

marce / lechu dijo...

AH, listo, listo, listo. Hay un poeta enamorado! Enbuenahora.

Nicolás dijo...

Ah, bueno. Redobló la apuesta el hombre. Ni se inmutó sobre el "los anónimos no son creíbles". En este caso creo que es el anónimo más creíble que alguna vez haya existido. Esta historia merece una continuidad, los lectores del blog así lo reclaman. La esperamos con ansias.
Por favor, anónimo, no te mueras nunca.

AYE dijo...

Estos son los anónimos copados, los que hacen bien al ego. Poco creíbles y con una dosis de cobardía, pero copados al fin.
Por favor, fantasma anónimo, no te mueras nunca.

Princesa Turquesa dijo...

Ay te encantaaaaaaa, ojalá te vaya mejor que a mí con la ciberconquista...!

Anónimo dijo...

¿Ves por qué me encantás tanto? Gracias por creer, por lo menos un poquito, profesora de danzas nativas, que le gusta la música, el dibujo, la escritura, la lectura y el cine; pero que también le gusta el deporte y el campo… y que escribe como un ángel… y que toca el saxo… y que tiene la bondad del cielo… Me siento afortunado sólo por haberte conocido.

Firma: El fantasma anónimo

ileana dijo...

quiero tener un blog!!!