lunes, 24 de agosto de 2009

DE CUMPLEAÑOS Y REGALOS (O NO)



Hay cumpleaños que son esperados y no me refiero a los propios: alguna amiga que uno quiere con intensidad, algún familiar que es importante en nuestras vidas, una pareja a la que uno ama profundamente. O un hijo.

En esos casos, el obsequio para esa persona es fruto de una dedicación. Uno empieza a pensar qué regalar desde un tiempo antes, recuerda cometarios del cumpleañero como para ver qué le gustaría, recorre lugares, averigua y selecciona algo con toda la pasión del mundo. Después, claro, puede fallar, pero difícilmente eso ocurra: la energía puesta en eso es tal, que sin dudas despertará alegrías en el agasajado.

El tema es que hay cumpleaños intermedios (o no). Esos que a uno le dan lo mismo. Ese es el tema: comprar o no comprar. A veces, uno compra algo de apuro, a último momento, por una pura cuestión de apariencias: sólo lo hace para no quedar mal. Otras, cae sin regalo. Y si va con un grupo, lo deja librado a la decisión del resto: si todos dicen que sí, pone el dinero correspondiente y ya.

Y hay otra división. Esos cumpleaños en los que alcanza con llevar sólo buena onda. El que festeja es un simple conocido, quizá un compañero de trabajo. De hecho, esos festejos pueden derivar en dos posibilidades: una reunión en la que uno la pasa diez puntos o una de la que se va a la media hora de haber llegado.

No iba a escribir más, pero me di cuenta de que en esa división podría hacerse una subdivisión: la de los cumpleaños de amigos o compañeros de trabajo de nuestra pareja. En esos casos alcanza con ir, sonreír e intentar que el reloj avance rápido. Y punto.

6 comentarios:

Jota dijo...

Y ya que hablamos de cumpleaños, porfa, avisame cuándo cumplís años una semanita antes, porque me olvido (de hecho, no lo sé).

Y te hago un regalo.

(y el 28/1 quiero el mío, no alcanza con tu buenísima onda)

De Tal Palo dijo...

Nada mas lindo que ver la carita de esa persona querida al recibir algo conseguido con dedicación.

vero dijo...

A veces son muy esperados los cumpleaños. Julieta, por ejemplo,cuenta los días que falta para el cumpleaños de sus papas, tios, abuelos, primas y el de ella. A veces es casador escuchar que diga, cuanto falta para el cumple de...

marce / lechu dijo...

Aye cumple el 2 de noviembre. A ella le gustaría hacer muñecos de tela (en ese caso habría que darse una vueltita por el Once para el agasajo correspondiente), hornos de barro (con un cacho de tierra también se la podría dejar contenta) y se devora la mermelada de arándanos (eso sí, si alguien le va a regalar un frasquito, que sea la Capagnola BC; otra marca la podría ofender).
En fin, ya ayudé bastante a los eventuales regaleros de Aye.

Abrazos

Princesa Turquesa dijo...

Coincido con Carita, nada como ver la idem de la persona a quien supiste elegirle el regalo. A mí me encanta comprar regalos -bah, me encanta comprar, pero ése es otro tema-, pero con el tiempo aprendí que no todo el mundo expresa de la misma manera y que también está bueno disfrutar de las diferencias...

Fedule dijo...

Genial Aye. Escorpiano como vos -subrayo, del 13-11-, no quiero dejar nada librado al azar. Aprecio mucho si el regalo es verde y tiene la cara de Benjamin Franklin.
Un beso.